sábado, 16 de mayo de 2020

Conchas

Ingredientes
-6 conchas-

  • 130 gr de harina de avena integral.
  • 50 gr de harina de almendra.
  • 60 ml de leche o bebida vegetal sin azúcares añadidos.
  • 35 gr de AOVE (Aceite de Oliva Virgen Extra).
  • 2 huevos.
  • 5 gr de polvo de hornear.
  • 1 cdita de extracto de vainilla natural.
  • Stevia al gusto.
  • 80 gr de chocolate negro 85%.

Preparacion

  1. Precalentamos el horno a 180ºC con calor arriba y abajo.
  2. En un bol tamizamos los ingredientes secos: harina de avena, harina de almendra y polvo para hornear.
  3. En otro bol mezclamos los ingredientes húmedos: huevos, AOVE, leche, vainilla y stevia.
  4. Vamos echando la mezcla de ingredientes secos al bol de ingredientes húmedos e integramos.
  5. Sobre un papel de horno dibujamos con un lápiz círculos de 7,5 cm de diámetro separados entre sí (nos ayudamos de un vaso o un cortador cicular) y lo colocamos dado la vuelta sobre una bandeja de horno.
  6. Agregamos la mezcla en una manga pastelera y rellenamos los círculos marcados haciendo una espiral del centro hacia afuera hasta llegar a la marca.
  7. Horneamos a 180°C durante 12 minutos o hasta que se doren ligeramente. Dejad suficiente separación entre los circulitos para que la mezcla no se junte durante el horneado.
  8. Sacamos del horno y dejamos atemperar sobre una rejilla.
  9. Derretimos el chocolate negro en el microondas a intervalos de 30 segundos para que no se queme.
  10. Bañamos únicamente la parte plana de las conchas en el chocolate, dejamos que escurra el exceso y las unimos por parejas por la parte del chocolate.
  11. Refrigeramos durante 10 minutos.

lunes, 11 de mayo de 2020

Dulce de leche: la receta

Ingredientes
  • 2 litros leche,
  • 240 gr azúcar (el 22%),
  • 2 cdas 1 de esencia de vainilla y
  • 2 gramos de de bicarbonato de sodio (1 gramo por litro).
  • Opcionalmente: 80 gramos de crema de leche.
La cocción
  1. En una olla de cobre o una de acero inoxidable preferentemente de fondo grueso cocinar los ingredientes a fuego fuerte y revolver con cuchara de madera.
  2. Cuando tome color marrón claro, bajar el fuego.
  3. Continuar revolviendo hasta que tome color más oscuro y se vuelva espeso.
    Lo normal es revolver pero hay quienes colocan un plato al revés o canicas de cristal que por el calor de la cocción se moverán y nos evitara el hecho de revolver.
  4. Cuando este marrón clarito y algo espeso hay que poner el fuego mas bajo para no pasarnos del punto de cocción, y seguir revolviendo.
  5. Para encontrar el punto y que cuando este frio no quede demasiado duro hay que ir probando y para esto tomamos un poco con una cuchara, lo ponemos en un plato y luego con la cuchara dibujamos un surco; si el surco se mantiene dividido y no se vuelve a juntar, esa es la textura buscada.

jueves, 30 de abril de 2020

Alfajores de chocolate y manjar

Ingredientes:
(50 alfajores)
  • 170 gramos de mantequilla a temperatura ambiente
  • 130 gramos de azúcar rubia
  • 2 huevos a temperatura ambiente
  • 20 gramos de miel líquida
  • 340 gramos de harina sin polvos de hornear
  • 2 cucharaditas de extracto de vainilla
  • 4 cucharadas de cacao en polvo, sin azúcar
  • 2 cucharaditas de polvos de hornear
  • 1 cucharadita de bicarbonato de sodio
  • 1/8 cucharadita de sal fina

Para el relleno:

  • 1 1/2 tarro de manjar (si lo hacen en casa con leche condensada, hervir por 2 horas y media desde que suelta el hervor para que les quede espeso)

Para la cobertura:

  • 200 gramos de chocolate semi-amargo, yo use uno con 60% de cacao
  • 1 cucharada de aceite vegetal

Preparacion:

  1. Para hacer la masa. En un bol amplio con batidora, batir la mantequilla hasta que este cremosa y pálida, unos 5 minutos, agregar el azúcar y batir hasta que este cremoso (3 minutos), agregar los huevos uno a uno, batiendo hasta incorporar, luego batir todo por 2 minutos para que este bien liviano. Agregar la miel y la vainilla, batir hasta incorporar. Cernir la harina, cacao, bicarbonato y sal, agregar al batido anterior y mezclar con cuchara de palo (no usen la batidora) hasta obtener una masa blanda y húmeda. Envolver en plástico de cocina y refrigerar por 1-2 horas.
  2. Precalentar el horno a 350F o 180C.
  3. Dividir la masa en 4 y sacar un cuarto y hacer una bolita, enharinar uno de los papeles siliconados y uslerear la masa con un uslero enharinado. Cortar los alfajores con un cortador en círculos de 3 cm de diámetro, colocar en una bandeja de horno cubierta con papel pergamino. Una vez horneados y fríos los puedes poner en una bolsa plástica y congelar. Esto lo hice 2 semanas antes de la fiesta. Repetir con los 3 trozos de masa restantes.
  4. Hornear por 5 minutos cada bandeja de horno (sin retirar el papel), solo 5 minutos en el horno precalentado, la masa va a crecer un poquito en el horno hacia arriba. Sacar y dejar enfriar en una rejilla en el mismo papel.
  5. Una vez fríos, yo los hice en la mañana y rellene en la noche, armar los alfajores. Envolver en plástico de cocina y refrigerar toda la noche.
  6. Al día siguiente picar el chocolate en trozos pequeños 1 cm mas o menos y agregar el aceite vegetal, derretir en el microonda, partir con 30 segundos, sacar, revolver por 1 minuto, seguir derritiendo en el microonda de 15 segundos en 15 segundos, revolviendo entre medio hasta que todo el chocolate se disuelva. Bañar los alfajores ayudándose de una cuchara y espátula. Refrigerar, sacar 2 horas antes de servir.

jueves, 23 de abril de 2020

Alfajorcitos de Chocolate

Ingredientes
-12 alfajores-

  • 130 gr de harina 0000 
  • 50 gr de cacao amargo en polvo 
  • ¼ cdta de sal 
  • 120 gr de manteca blanda 
  • 100 gr de azúcar impalpable 
  • 1 cdta de esencia de vainilla 
  • 500 gs de dulce de leche 
  • 50 gr de azúcar impalpable para espolvorear.

Preparación

  1. Tamizar la harina, el cacao y la sal. Reservar.
  2. Colocar la manteca, el azúcar impalpable y la vainilla en la batidora y trabajar con el gancho  mezclador por 5 min hasta unir. 
  3. Incorporar en 3 intervalos los ingredientes secos y batir a velocidad baja hasta formar una masa (si la masa resultase muy seca y le cuesta unir llevarla a una mesada y trabajarla no mucho con las manos hasta unir) 
  4. Apoyar  sobre un papel manteca enharinado o un nylon y aplastar hasta obtener un disco. Refrigerar. 
  5. Estirar sobre una mesada enharinada hasta llegar a un espesor de ½ cm. Cortar discos con un cortapastas  de 5 cm de diámetro.  Colocar sobre placas siliconadas y hornear a 175 ºc. durante 12’. Retirar y dejar  enfriar completamente. 
  6. Untar las tapitas con el dulce de leche y superponer con otra. Espolvorear con azúcar impalpable la superficie y presentar.

lunes, 3 de febrero de 2020

Macarons (Macarrons) - Receta

Ingredientes:
  • 110 g de harina de almendras (o almendra molida)
  • 220 g de azúcar glas
  • 3 claras de huevo envejecidas (deben pasar al menos una noche a temperatura ambiente tapadas con papel film)
  • 30 g de azúcar 
  • colorantes en gel
Elaboración:
  • Tamizamos la harina de almendras junto con el azúcar glas, repetimos el proceso unas tres o cuatro veces, si tenemos robot de cocina con accesorio picador también podemos utilizarlo antes de tamizar (si lo utilizásemos, sólo tendríamos que tamizar una o dos veces). Reservamos.
  • Batimos las claras envejecidas a velocidad máxima (como he indicado en los ingredientes, para envejecer las claras hay que dejarlas fuera de la heladera durante toda la noche a temperatura ambiente en un bol tapado con papel film). Cuando empiece a salir espuma añadimos los 30 g de azúcar blanco.
  • Seguimos batiendo a velocidad máxima. Cuando estén a punto de montarse las claras le añadiremos el colorante en gel, la cantidad dependerá del tono que queramos conseguir, tener en cuenta que el color siempre bajará un poquito al hornear. Seguimos batiendo hasta que las claras estén montadas, lo sabremos porque se quedan dentro de las varillas y se forman unos piquitos al batir.
  • Ahora pasamos a uno de los puntos clave de nuestros macarons: el macaronage si no hacemos bien este paso podemos estropear nuestros macarons. Así que tomar nota: en el mismo cuenco añadimos la mitad de la mezcla de las almendras + azúcar glas y mezclamos con una espátula grande. Integramos con movimientos envolventes, veremos que las claras empezarán a bajarse. Cuando esté integrado (no hace falta que esté perfectamente integrado), añadimos la otra mitad y seguimos envolviendo nuestra mezcla. Apretamos con la espátula las paredes del bol para aplastar los grumos de almendra y seguimos envolviendo y envolviendo.
  • Foto de la Web

    Es en este momento en el que debemos tener sumo cuidado, no nos debemos pasar de mezclado pero tampoco debemos quedarnos cortos, es decir, si al coger un poco de mezcla con la espátula ésta cae como si formara una cinta, entonces está perfecto. Éste es el llamado punto de cinta. Es mejor quedarse un poco corto que pasarse de cinta. Si nos pasamos quedará una mezcla demasiado líquida y no saldrán los macarons.
  • Pasamos la mezcla a nuestra manga pastelera y formamos los famosos macarons. Es importante que tengan todos el mismo tamaño. entre uno y oro hay que dejar espacio porque luego la mezcla se expande.
  • Cuando ya los tenemos todos hechos le damos unos golpes por la parte de abajo para que las burbujas que se hayan formado salgan a la superficie.
  • Dejamos secar a temperatura ambiente hasta que la capa de arriba quede seca y lisa (no presionemos demasiado porque se romperán). El tiempo puede depender de muchísimos factores, en invierno por ejemplo pueden tardar hasta tres horas en secarse, en cambio un día de calor pueden tardar 20 minutos. 
  • Una vez esté seca la superficie encendemos el horno a 150ºC. Cuando esté caliente los ponemos en el centro del horno con calor arriba y abajo (mejor sin aire) y horneamos unos 13 minutos. A mitad de horneado abrimos la puerta del horno para dejar salir el vapor. Si ven que se tuestan por la parte de arriba demasiado entonces debemos bajar un poco la temperatura y viceversa. Los macarons deben tener un pie (es la parte esponjosa que aparece, éste sube durante el horneado y no debe bajar, cosa que a veces inevitablemente pasará mientras hagamos prácticas). Sabremos que los macarons están listos cuando la superficie esté endurecida y la base pueda despegarse.
  • Dejamos enfriar fuera del horno todavía en la bandeja y no los quitaremos hasta que no estén completamente fríos. Podemos rellenar con infinidad de recetas, mermeladas, dulce de leche, cremas, etc.
Los macarons deben tener un interior cremoso y esponjoso (no deben quedar huecos), el pie (parte esponjosa exterior) debe ser rugoso y estar bien formado. La concha o coquille (superficie) debe ser lisa firma y tener un aspecto satinado. Para llegar a conseguir un macaron perfecto deberemos practicar más de una, dos y tres veces esta receta de macarons.

Macarons (macarrón)

El macarrón (del francés macaron, y este a su vez del italiano maccarone) es un tipo de galleta tradicional francesa hecho de clara de huevo, almendra molida, azúcar glas y azúcar. De origen italiano, el dulce se dio a conocer en el siglo XVI, surgiendo del horno del pastelero de la corte francesa como cúpulas redondas con base plana, y en el siglo XIX se empezaron a unir de dos en dos con un relleno entre medio. Los macarons se hacen de una amplia variedad de sabores, según la confitería y la época del año.

Los macarons actuales son pastelitos hechos de dos galletas y una crema o ganache entre ambas, y no deben confundirse con los dulces de nombre parecido llamados macaroons, que son dulces densos hechos con almendra y clara de huevo o con una pasta de almendra gruesa.

El término 'macaron' o 'macarrón' deriva de la palabra italiana maccarone en el italiano de Sicilia, que en el siglo XV designaba una pasta seca en forma de bolitas, parecido al moghrabieh de Oriente Medio.

Antes del siglo XVI, el macaron se confunde con la forma maccarone, su antepasado lingüístico, que designaba diversos tipos de pasta seca cocida en un líquido. De ahí que a veces surja la dificultad de saber a qué producto se refieren las fuentes históricas. El macaron como pasta dulce hecha a base de almendra apareció en la Edad Media, diversificándose hasta alcanzar nuevas formas y nuevos sabores.

Oriundo de Italia, el macaron pasó a Francia en el Renacimiento, cuando la reina Catalina de Médici mandó ofrecer maccarone a los convites de la boda del duque de Joyeuse en París en 1581. Este habría llevado la receta al pueblo de Joyeuse, en el actual departamento francés de Ardèche, donde se sigue confeccionando bajo el nombre de «macaron de Joyeuse».

El macaron en el diccionario enciclopédico
de Albert Seigneurie, publicado en París en 1904.
Extraña que Nostradamus no hiciera mención del dulce en su Traité des Fardements et Confitures, publicado en 1552. Si bien lo cita el insigne Rabelais en su obra Le Quart Livre, publicado el mismo año, su origen sigue siendo un misterio.

Algunos textos recogen una receta parecida que se extendió con el nombre de ghouryeba o ghriba por la región de Marrakech en época del sultán almorávide Yusuf ibn Tašufin. La misma receta aparece en Siria en el siglo XV bajo el nombre de louzieh.

Al principio este dulce constaba de una única cara, y varias ciudades francesas pretenden que nació dentro de sus muros y múltiples leyendas se crearon alrededor de este dulce a base de almendra, azúcar y clara de huevo, crujiente por fuera y blando por dentro.

Algunos afirman que este ‘ombligo del monje’ (Larousse Gastronomique) fue creado en 791 en un convento cerca de Cormery, otros dicen que Catalina de Médicis lo llevó desde Italia. La primera receta de macaron figura en una obra que se remonta a principios del siglo XVII.

En el País Vasco francés, el macaron apareció en San Juan de Luz gracias a la iniciativa de un pastelero, Adam, que regaló algunos a Luis XIV por su boda en 1660. Desde entonces, los descendientes del pastelero perpetúan la tradición. En la misma época, los maestros cocineros de la familia Dalloyau, cuyos descendientes fundarían en 1802 la casa gastronómica del mismo nombre, sirvieron macarons a la realeza de la entonces gobernante casa de Borbón en la corte versallesca, hasta la Revolución Francesa.

En Lorena, el macaron apareció bajo los auspicios de las Señoras del Santo Sacramento, con una receta que se ha mantenido secreta desde el siglo XVIII. La receta de los macarons de Boulay, fiel a la receta original, surgió en 1854. Estos manjares se caracterizan por una costra crujiente y un interior cremoso.

En la década de 1830 los macarons ya se servían de dos en dos con un relleno de mermeladas, licores y especias. El macaron popular en la actualidad es el macaron Gerbert, creado en los años 1880 en el barrio parisino de Belleville. A continuación, se dio a conocer al público gracias a dos establecimientos: el salón de té Pons del Barrio Latino de París, que ya no existe, y la famosa casa Ladurée, que a partir de mediados del siglo XX les dio un tono pastel u otro para diferenciarlos en función de su sabor. El macaron tal y como se conoce en la actualidad fue inventado por esa misma pastelería, que también introdujo la noción de «macarons del tiempo» para referirse a aquellos que están a la venta durante tres meses.

El macaron se ha confundido con frecuencia con el mazapán, dulce de almendra que difiere del macaron actual y pasado tanto por las proporciones de sus ingredientes, como por su sabor y su forma.

Su forma actual azucarada y sabrosa poco tiene que ver con los macarons de Lorena, que saben a almendra y tienen una costra crujiente y un interior cremoso.

Hoy, los macarons franceses se exportan y se elaboran en todo el mundo: se encuentran en Nueva York, Berlín, Tokio, Londres y América Latina.

A finales de la década 2000, aparecen macarons cuyos rellenos tienen un olor diferente a la masa:8 de melocotón-rosa, lima-albahaca, praliné-yuzu, café-spekulatius, pera-naranja, etcétera.

Una variante del macaron llamada makoron, que sustituye el cacahuete molido por almendra molida y se condimenta al estilo de los wagashi (se elabora principalmente con mochi -pastel de arroz glutinoso-, anko -pasta endulzada de judías azuki- y fruta.), está ampliamente disponible en Sendai (Japón).

Luxemburgerli de frambuesa
La Confiserie Sprüngli de Zúrich, en Suiza, vende luxemburgerli, que es parecido al macaron pero algo más pequeño y esponjoso. Consiste en dos galletas a base de azúcar con un relleno de crema en el centro. La diferencia entre macaron y luxemburgerli es que este último es más ligero y tiene una consistencia más vaporosa. Cada galleta tiene unos 2,5 cm de diámetro.

Se fabrican de muchos sabores: vainilla, chocolate, stracciatella, caramelo, avellana, champán, amaretto, castaña, mocha, canela, limón, mandarina o frambuesa. Algunos de los sabores de fruta están disponibles solo en temporada. Se conservan unos 3–5 días solamente, y deben mantenerse refrigerados.

Los luxemburgerli fueron ‘inventados’ por la repostera Camille Studer, quien llevó la receta a Zúrich tras confeccionarlos originalmente en una confitería luxemburguesa (Confiserie Namur) en 1957. Allí fue refinada la receta para un concurso de confitería. El nombre procede del apodo que un colega puso a Studer, cuya familia era oriunda de Luxemburgo. El nombre original, Baiser de Mousse (‘beso de espuma’ en francés), no resultaba apropiado para la nueva creación y se denominó Gebäck des Luxemburgers (‘galleta de luxemburgueses’), que en dialecto germanosuizo acabó en luxemburgerli (‘pequeños luxemburgueses’).


Ingredientes
  • 135 g de azúcar glas
  • 135 g de almendras molidas
  • 100 g de claras de huevo
  • 135 g de azúcar en polvo
Preparación
  1. Muela y tamice las almendras y el azúcar glas en partes iguales (Tant Pour Tant, TPT).
  2. Batir la clara de huevo a velocidad media hasta que esté espumosa.
  3. Agregue el azúcar en tercios, batiendo hasta que se incorpore cada adición.
  4. Batir en alto hasta que el merengue alcance la etapa de pico rígido.
  5. Incorporar el "tant pour tant" en el merengue (tamizando).
  6. Con ayuda de una manga disponer redondelas sobre un papel pergamino en rondas de 1 pulgada (2,5 centimetros).
  7. Dejar reposar 1-2 horas.
  8. Hornee a 150C / 300F por 12min.
  9. Dejar enfriar antes de retirar del pergamino, emparejar macarons del mismo tamaño y rellenar (con, por ejemplo, ganache).

viernes, 31 de enero de 2020

Teoría de los macarons

Una de las elaboraciones de pastelería que mas quebraderos dan a los que intentamos elaborarlos en casa son los macarons. Los macarons es la combinación de un merengue con una carga de frutos secos ( almendra, nueces, avellanas, pistachos, etc ). Una de las premisas que tenemos que tener en cuenta es evitar la perfección del macarons cuando comenzamos, pues aunque a nosotros nos parezcan que no están muy bien, seguro que están súper ricos, y os aseguro que en un inmenso numero de pastelerías y confiterías en Francia, no tienen ese acabado perfecto que andamos buscando pero sin embargo están deliciosos.
Para conocer este preparado debemos conocer una de sus bases: el merengue. Los macarons pueden elaborarse con distintos merengues: el francés ( claras batidas a temperatura ambiente a las que se les agrega una cantidad de azúcar), el italiano ( un merengue al que se le ha adicionado un almíbar entre 112ºC a 118ºC ), el suizo ( se atemperan las claras junto con el azúcar al baño maría sin sobrepasar los 60ºC para evitar la desnaturalización de las proteínas de las claras del huevo y se espuman templadas ), el japonés ( un merengue con una carga de almendra molida y un espesante tipo maicena )….Como veis tenemos numerosas combinaciones, tan solo es elegir a la que mejor se adapte a nosotros. Pero veamos los distintos elementos que conforman un macaron !!
LAS CLARAS DE HUEVO, LAS PROTEINAS Y LAS GLOBULINAS
Normalmente usamos el merengue francés y el italiano para realizar los macarons, pero cualquiera de los anteriores serían también válidos. Pero ¿ que problemas podemos encontrar a la hora de realizar un merengue ? Pues mirad, para ver los problemas que nos podemos encontrar cuando lo elaboremos, debemos ir al centro del producto, las claras y estudiar de que están compuestas y como interactúan con la temperatura, el batido, los ácidos…. Mirad, la clara de huevos es un líquido formado fundamentalmente por proteínas y posee un PH básico, es decir oscila entre un PH 8 a 8,2. De todas las proteínas que conforman la clara, solo unas, las globulinas, tienen una capacidad de unirse cuando las batimos y de retener las burbujas de aire cuando las levantamos con una varilla. Estas proteínas, las globulinas, tienen una cualidad, que poseen una carga negativa. Cuando batimos unas claras de huevo tal cual, sin nada, sin azúcar, sin sal, ni nada, las globulinas tienden a unirse, captan burbujas de aire y terminan formando una espuma mas o menos densa. Pero yo creo que a todos nos ha pasado que si las dejamos reposando una horita, al final vemos que en la parte de abajo de nuestro recipiente, se empieza a formar un líquido que no es otra cosa que la clara de huevo. Pues bien, esto es totalmente normal, ya que las proteínas al unirse por el batido tienden a repelerse como se repelen dos imanes del mismo polo. Para evitar este fenómeno físico, utilizamos una sal , cloruro sódico ( sal ), crémor tártaro ( sal que se  deposita en forma de posos en los barriles de fermentación del vino procedente del zumo de la uva ), zumo de limón ( ácido cítrico ), vinagre ( ácido acético )…. Esta incorporación del ácido hace que el líquido ( la clara ) se vuelva ácida, cambia su PH y la carga de las globulinas se pierde evitando así el efecto de REPELENCIA  permaneciendo estables. Como dato curioso, hace siglos se usaban vasijas de cobre. Los que hemos estudiado química sabemos que el material cobre posee dos protones ( 2 cargas positivas ) de forma que cuando se baten claras de huevo en este tipo de vasijas, las cargas positivas del cobre neutralizan las negativas de las globulinas dotándolas de estabilidad. Es en este caso que no tendremos que adicionar una sal ó ácido para estabilizarlas. Hoy en día a nivel industrial no se permite el uso del cobre. Así que siempre que levantemos unas claras necesitaremos una sal ó ácido para estabilizarlas ( sal, crémor tártaro, zumo de limón, ácido málico ó cítrico, etc )
CLARAS ENVEJECIDAS, CLARAS PASTEURIZADAS Y CLARAS DESHIDRATADAS
Muchas veces hemos leído distintas recetas con claras de distinta procedencia. Lo básico para cualquier merengue es tener unas claras que estén más o menos envejecidas o lo que viene a ser lo mismo deshidratadas. Es verdad que podremos realizar un merengue con una clara recién sacada del huevo, pero es infinitamente mejor si está ligeramente deshidratada. Para ello tan solo hay que sacar las claras del huevo, dejarlas varios días en un recipiente semi tapado en la nevera y estarán listas. La explicación física es muy sencilla, cuanto más carga de agua tengan las claras, más les costará a las globulinas unirse, pues tienen más peso, y el agua ( que es peso ) terminará haciendo reventar las burbujitas. Podemos usar las claras pasteurizadas sin ningún tipo de problema, ya que este tipo de claras están sometidas a un proceso de pasteurización que consiste en llevarlas a una temperatura que ronda los 60ºC durante unos minutos para eliminar cualquier traza bacteriológica. Este tipo de claras poseen las mismas proteínas aunque a veces pierden algo de propiedades pues pueden haberse desnaturalizado si en el proceso de pasteurización se superan los 65ºC ( recordad cuando freímos un huevo como la clara se vuelve blanca, a ese efecto visual le llamamos desnaturalización ). Por otro lado este tipo de claras las pasteurizadas están ligeramente deshidratadas por el proceso de temperatura a las que han sido sometidas, así que genial!!!
También encontramos las claras en polvo deshidratas. No se trata mas que claras pasteurizadas que se han deshidratado de forma industrial. Este tipo de claras suelen venir acompañadas de un montón de productos extras como almidones ( que evitan la humedad ), sales  ácidas ( que estabilizan las claras cuando agreguemos agua ), emulsionantes, azucares, etc. Este tipo de claras podemos usarlas sin problema para realizar merengues, pero al agregar la parte líquida volveremos a hidratarlas empeorando el buen resultado del merengue. En el caso del macaron a mi no me ha dado muy buen resultado pero se pueden hacer igualmente


BACTERIA DE LA SALMONELLA
TEMPERATURA DE LAS CLARAS PARA REALIZAR UN MERENGUE
La temperatura es básica a la hora de espumar unas claras. A nivel físico es normal, las globulinas no tienen la misma forma cuando están frías a cuando están a temperatura ambiente. Estas proteínas tienen forma de muelle y a menos temperatura estos muelles están encogidos, retraídos, con lo que al batirlos les costará un montón estirarse y unirse con las otras globulinas para capturar las burbujas de aire. Y al contrario, a mas temperatura estos muelles se volverán más elásticos y extensibles facilitando su unión y aumentando la capacidad de capturar estas burbujitas de aire. Por eso el merengue suizo es tan efectivo, porque las claras las atemperamos al baño maría sin superar los 60ºC, las proteínas están completamente estiradas y cuando las batimos se espuman de la mejor forma posible.
Cuando realizamos un merengue italiano ( incorporamos una carga de almíbar entre 112ºC a 118ºC a las claras que ya están espumadas ), cabe la posibilidad de desnaturalizar las proteínas. Para evitar este efecto debemos incorporarlo poco a poco sin dejar de batir, ya que con el batido incorporamos aire y éste le hará bajar la temperatura del almíbar sin que sufran las globulinas. Con este sistema obtenemos un doble beneficio, por un lado eliminamos cualquier riesgo bacteriológico ( a 60ºC pasteurizamos ) y damos cierta temperatura para que las proteínas se liguen a la perfección
BATIDO DEL MERENGUE
Otra fase importantes a la hora de realizar un merengue, es el batido. Muchos de los fracasos del macaron es la batida incorrecta de las claras. Cuando realizamos la primera batida, además de incorporar una sal ácida ( sal, crémor tártaro, etc ) o ácido ( limón, vinagre etc ) es incorporar de forma suave las burbujas de aire. Tenemos una mala costumbre de batir de forma enérgica las claras al inicio, lo que es un error pues el tamaño de las burbujas que incorporamos serán de un tamaño descomunal lo que no es bueno, pues a mayor tamaño de burbuja, menor resistencia, se rompen con mayor facilidad. Curiosamente las burbujas de aire más pequeñas son infinitamente más resistentes, lo que nos ayudará a subir nuestro merengue de forma mas homogénea. Cuando levantemos unas claras id despacio, a velocidad muy baja hasta que veamos que empieza a espumar ( nos llevará de 5 a 8 minutos, un rollo, pero es así como hay que hacerlo ) y en este momento aumentaremos la velocidad, pero velocidad media NUNCA ALTA. De esta forma cuando incorporemos nuestra carga ( harina de almendra, de nueces, de pistachos, almibares, etc ) no se romperán las burbujitas, obteniendo un conjunto homogéneo y aireado.
Por otro lado, hay un punto máximo de batida en ciertos merengues como el francés. Otra idea que tenemos es batir durante mucho tiempo porque pensamos que cuanto mas tiempo batamos mejor me quedará el merengue. También es un error. El merengue francés estará listo cuando veamos que quedan picos al levantar la varilla y esté brillante. Una vez alcanzado este punto no debemos seguir batiendo pues produciríamos el efecto contrario, las globulinas están muy estiradas y empiezan a romperse dejando escapar el aire.
MACARONAGE
Otra etapa crucial cuando realicemos un macaron es lo que en Francia se llama el macaronage. Consiste en agregar la carga de frutos secos con el merengue ( francés, italiano, suizo…) y debe realizarse con mucho mimo, realizando movimientos envolventes hasta integrar. Debemos incorporar una parte del merengue sobre la carga y mezclar con movimientos envolventes, luego otro poquito y mezclar con movimientos envolventes, otro poquito y mezclar…. Nuestra mezcla debe  estar perfectamente integrada pero sin estar demasiado trabajada, pues si nos excedemos perderemos las burbujas de aire que hemos incorporado en nuestra batida. Lo ideal es que al décimo  movimiento envolvente nuestra mezcla esté lista ( aunque esto no es una regla ). El punto exacto lo tendríamos cuando cogemos una cierta cantidad de masa con la espátula y al dejarla caer le costara un poco.
COLORANTES Y EL HORNEADO
Uno de los detalles que más enamoran al consumidor de macarons son sus colores vivos que incitan a su consumo y hacen adivinar de que puede ser su relleno. Los colorantes alimentarios son algo caprichosos y sufren mucho con la temperatura y el tiempo prolongado del horneado. Yo suelo usar colorante en polvo pues evitan incorporar líquido a las claras ( lo que le ayudará a las proteínas a ligarse mejor ) y suelen comportarse mejor durante el horneado. No obstante dependen de las marcas. Hay colorantes en gel con una pigmentación muy buena y estable que soportan genial el horneado. Lo que es muy interesante es que estos pigmentos no suelen soportar temperaturas superiores a 165ºC durante mucho tiempo. Por eso vais a ver que los macarons ( entre otras razones ) se hornean entre 90ºC a 160ºC como máximo.
Un buen momento para agregar los colorantes, es cuando estemos acabando nuestro merengue. Al tener una textura húmeda resultará más fácil que si los agregamos al final, durante el macaronage
COQUILLE LISA Y BRILLANTE
La coquille es la parte de arriba del macaron, la concha ( traducción ) y ésta obsesiona a muchísimas personas. Como os dije al inicio del POST, cuando empecéis a elaborarlos, no debéis obsesionaros, debéis ir cogiendo soltura con los merengues, con el macaronage y otros detalles muy importantes. No obstante una coquille lisa y brillante es mucho más atractiva que una rugosa. Para obtener una coquille lisa tan solo hay que tener en cuenta que debemos usar un polvo de almendra muy fino y seco. A mi me gusta mucho la almendra molida del MERCADONA porque es muy poco grasa y queda genial. Aunque también podéis picar la almendra entera junto con el azúcar glass hasta que quede una harina fina. En este caso no hacerlo de forma continua ni por mucho tiempo ya que podrían salir los aceites esencailes de la almendra y nos quedaría un conjunto graso. Para ello cuando realicemos el ” TANT POUR TANT ” ( la mezcla inicial en la que mezclamos azúcar en polvo y la almendra ), debemos pasarlo varios segundos varias veces por un robot procesador, para terminar de reducir al máximo las partículas de la carga. Debemos prestar máxima atención a esta etapa, pues los frutos secos al someterles al efecto de las aspas, y por tanto a la fricción ( produce calor ), podrían engrasar el conjunto empeorando nuestro ” TAN POUR TANT “. ¿ Y que le suceden a las burbujitas cuando le metemos una carga con mucho peso ? Pues el aceite someterá de peso a las burbujas de aire terminándolas por romper. Así que en esta fase PRECAUCIÓN!!
Una vez lista nuestra harina de frutos secos y azúcar en polvo ( TANT POUR TANT ) es imperativo la tamización. Para ello cuando más fino sea nuestro colador, más fina será nuestra coquille. Yo uso uno muy fino, y me ayudo muchas veces con las yemas de los dedos al tamizado.
PRESECADO ANTES DEL HORNEADO O CROUTAGE ( COSTRADO )
Otra de las etapas que nos cuesta es entender porque se secan los macarons ligeramente antes de hornearlos. Cuando hayamos colocado nuestros macarons sobre la bandeja del horno ( con papel sulfurizado o tapete de horno ), debemos romper las burbujas grandes que puedan haber en el interior para evitar que éstas durante el horneado nos deformen las piezas. Para ello dejaríamos caer varias veces la bandeja sobre la mesa para romperlas. Realización del presecado. Esta etapa es crucial para que nuestros macarons no se nos abran por la parte de arriba. La coquille debe estar ligeramente seca, es normal, sino lo estuviera durante el horneado las burbujas de aire se escaparían por arriba, formando agujeros y dejando escapar el gas. Resultado unos macarons sin volumen y con apariencia de queso gruyère. El tiempo de presecado varía si es invierno o verano, si vivimos en una zona húmeda o zona seca. Por ello los tiempos pueden variar entre 30 minutos en verano en una zona seca a 1 hora en una zona más húmeda. No podemos excedernos tampoco con el secado pues lo que en principio resulta un beneficio podría tener el efecto contrario y nuestros macarons crecerían pero con un  pie muy alto y una coquille muy recta ( sin forma de semiesfera ). Es normal, si la coquille se ha quedado muy seca, el aire tiende a escaparse por los puntos de fuga mas tiernos, o sea por el pie. Resultado un pie muy alto, una coquille muy plana lo que tampoco es correcto
Por ello cuando tengamos nuestra bandeja lista, colocaremos los macarons en la zona mas templada y seca de nuestra casa. Para saber cual es el punto optimo de presecado, tan sólo basta tocar ligermanete con la yema de un dedo la coquille y si no se pega están listos para el horneado.
HORNEADO
Otra parte crítica en la elaboración de los macarons es el horneado. Mirad, cuando hablamos de horneado en esta elaboración, no nos referimos a hornear, sino a SECAR O TERMINAR DE DESHIDRATAR el macaron. Tenemos que tenerlo claro porque sino no entenderemos que es un merengue en sí. El horno es muy importante y debemos usarlo como un aparato para secar, exclusivamente. Cuando hacemos un merengue en el horno, solemos ponerlo a baja temperatura durante mucho tiempo ( 1 1/4 horas  a 1 1/2 horas ). Cuando hacemos los merengues secos, lo que hacemos es secarlos a unos 100ºC a 110ºC durante un tiempo muy largo. Pero ¿ Que ocurre dentro de nuestro merengue cuando los metemos en el horno ? Hay un fenómeno que se denominamos coalescencia. Este fenómeno hace que a medida que sube la temperatura, los gases que forman nuestras burbujitas de aire ( CO2, nitrógeno, etc ) aumente de tamaño, empiezan a expandirse, uniéndose unas burbujitas con otras formando otras de mayor tamaño. Es como cuando inflamos un globo, le metemos una fuente de calor y éste hace que los gases empiecen a extenderse por la diferencia de presión, haciendo aumentar el globo de volumen y terminando por flotar. Pues dentro del merengue pasaría lo mismo. Empezarían a crecer aumentándonos el volumen del macarons. Por otro lado dentro del horno, el vapor proveniente del liquido del merengue empezará a evaporarse generando el efecto sauna. Por ello es importante  abrir la puerta del horno unas cuantas veces para bajar la humedad relativa del horneado. Así obtendremos unos merengues secos y perfectos.
El tiempo de horneado de los macarons varían mucho, dependiendo de la temperatura que usemos para su deshidratación y del tamaño de la pieza. Si decidimos usar una temperatura baja ( 90ºC ), nuestro secado puede prolongarse hasta 60 minutos. Pero por el contrario si horneamos a 150ºC nuestro secado se puede prolongar unos 15 a 17 minutos. A más temperatura  corremos el riesgo de estropear el color del macarons, de quemarlo pero eso sí el secado será más corto. A mi personalmente me gusta hornearlos entre 145ºC a 150ªc durante unos 15 a 17 minutos ( depende del tamaño de la pieza ).
Sin embargo el encontrar el punto exacto es complicado. Si hemos hecho todas las piezas de igual tamaño y nuestro horno calienta por igual por cada rinconcito ( es importante que chequeéis el temperatura con un termómetro de vez en cuando ), pasado el tiempo suelo usar una pequeña espátula y pasarla por debajo de un macarons para ver si se despega ligeramente. No es al 100% efectivo pero vale de guía. Si se nos pega ligeramente al papel de horno les faltarán un par de minutos más. Lo importante es no pasarnos de horneado pues se nos secarán ( aunque a mi nunca me ha pasado ).
Y por último ¿ aire o resistencia arriba o abajo ? Mirad cada horno es un mundo y esto no vale de regla general. Yo he realizado macarons con aire y éste le ayuda a secarse pero también existe el riesgo que si el flujo de aire es muy fuerte los tumbe. Por otro lado cuando horneemos con aire debemos bajar unos grados para ajustarlo a la receta. A mi me gusta hornearlos sin aire con la resistencia arriba y abajo y la bandeja por debajo del centro de mi horno. No obstante cada horno es distinto y debéis hacer varias pruebas de temperatura.
Una vez los macarons estén secados, los sacaremos y despegaremos con cuidado cuando estén templados. Veréis que hay varias técnicas para enfriar la temperatura de la bandeja una vez sacada del horno ( pulverizar con agua por debajo del tapete de silicona sería una de ellas  ). Yo no lo hago y se despegan genial. Los colocamos en una rejilla y dejamos reposar un par de horas. Los macarons debemos dejarlos un día para que se asienten dentro de un túper y al día siguiente se rellenan
UN MACARONS PERFECTO ES AQUEL QUE TIENE UN PIE ACEPTABLE, UNA COQUILLE BRILLANTE Y ALGO ABOMBADA Y UN INTERIOR JUGOSO
Aunque hay muchos tecnicismos, la repostería es química y mucha física y es interesante saber que ocurre en cada elaboración. Así podremos entender que errores hemos cometido.
No busquéis la perfección a la hora de hacer este básico de pastelería. Solo la práctica os hará conseguir piezas cada vez más perfectas

El macaron en el diccionario enciclopédico de Albert Seigneurie, publicado en París en 1904.

El macaron en el diccionario enciclopédico de Albert Seigneurie, publicado en París en 1904.

Alfajores Murcianos

Ingredientes:
  • 7 kilos de miel
  • 2 kilos y medio entre almendras, Avellanas, Nueces
  • 2 kilos de pan duro para hacerlo harina
  • Aceite
  • Agua
  • sal
  • 100 gramos de canela en rama
  • 4 cortezas de limón
  • 4 cortezas de naranja
  • Oblea
  • Nuez moscada
  • Clavo
Preparación
  1. Poner a hervir la miel.
  2. Preparar el pan, con harina, un poco de aceite, agua y sal. Una vez amasados, se hacen unas barritas y se meten al horno, se mezcla, la nuez moscada y el clavo, echándolo todo a la miel hirviendo.
  3. Rallar las cortezas de naranja y limón, la canela, y añadir también, y por último el pan.
  4. Se deja que se vaya deshaciendo, hasta que coja textura.
  5. Una vez hecho, se deja enfriar, y se van cogiendo montoncitos con la mano mojada en anís, y se van echando sobre la oblea, dejándolo enfriar.

Alfajores de almendra

Ingredientes
Para los Alfajores:
  • 250 gramos de Harina de trigo
  • 250 gramos de Almendra molida
  • 6 gramos de Ajonjolí
  • Una pizca de Sal
  • 8 gramos de Canela
  • 8 gramos de Cacao en Polvo
  • Pizca de Clavo molido (aprox. 4) (opcional)
  • Un sobre de Azúcar vainillada
  • 100 gramos de Miel
  • 100 ml de Agua
  • 50 gramos de Almendras en cubitos
  • 3 gotitas de Esencia de Almendra (opcional)
Para el Almíbar
  • 50 gramos de Azúcar Moreno
  • 100 ml de Agua
  • Para Rebozar
  • Azúcar Glas al gusto
Preparación
  1. Primero ponemos en una sartén sin engrasar a fuego medio la Harina y la removemos para que no se nos queme. La harina estará lista cuando se ponga un poquito oscura.
  2. Después ponemos la Miel en el microondas y la dejamos hasta que quede líquida, pero que no llegue a hervir. (Ponerla a una potencia media).
  3. A continuación ponemos en un bol la Almendra molida, el Ajonjolí, la Canela, la pizca de Sal, el Cacao, la pizca de Clavo molido, el Azúcar vainillada, y removemos.
  4. Una vez que lo tengamos mezclado tamizamos sobre la mezcla la Harina y volvemos a mezclar.
  5. Cuando esté integrado añadimos la Miel líquida y removemos hasta que se mezclen todos los ingredientes.
  6. Después agregamos a la mezcla el Agua y la esencia de Almendra.
  7. Cuando lo tengamos todo añadimos las Almendras en cubitos, amasamos con las manos para que vaya soltando el aceite de las almendras y se mezcle bien con la miel. Apretamos la masa y así conseguimo un buen amasado.
  8. Ponemos a precalentar el horno a 210º - 220 ºC.
  9. A continuación vamos haciendo bolas (yo las he hecho con un peso aproximado entre 35 y 40 gramos) y las apretamos fuertemente como si fueran una croqueta, después las aplanamos un poco.
  10. Una vez que las tengamos las colocaros sobre una fuente de horno a la que habremos puesto papel sulfurizado (o papel de horno).
  11. Introducimos la bandeja en el horno durante unos 7-10 minutos hasta que los bordes comiencen a tomar color. Dejar templar.
  12. Preparamos un almíbar normal con 100 ml de Agua y 50 gramos de Azúcar, lo dejamos hervir hasta que esté hecho el almíbar y lo dejamos enfriar.
  13. Rebozamos los alfajores, pasándolos primero por el almíbar y después por abundante Azúcar Glas.
  14. Los dejamos secar sobre la bandeja y aunque alguno caerá sobre la marcha debemos consumirlos de un día para otro.
Consejos
  • Horno: También podéis tostar la harina en el horno poniéndolo a 130 ºC con calor arriba y abajo removiendo cada 5 minutos para que no se nos queme.
  • Tostar la almendra: También podemos al igual que la harina tostarla. Lo podemos hacer junto o por separado. El problema de hacerlo junto es que al tamizarla nos costará porque la almendra no pasará tan fácilmente, por eso si lo hacéis por separado quedará perfecto.
  • Almendra en cubitos: Si no queréis encontraros con trocitos de almendras podéis poner directamente 300 gramos de almendra molida.
  • Almíbar: Yo lo he hecho con azúcar morena pero también lo podéis hacer con azúcar blanca.
  • Presentación: También se pueden presentar haciendo bolitas como si fueran bombones y colocarlos sobre cápsulas de bombones. Pero sin olvidarnos rebozarlas en azúcar glas.
  • Conservación: En latas metálicas aguantan mucho tiempo.

Alfajor Santafesino

Ingredientes

  • 150 grs de harina.
  • 1/2 cucharada de harina.
  • 3 yemas.
  • 1 cucharada de manteca.
  • 150 grs de azúcar impalpable.
  • 100 ml de crema de leche.
  • 600 grs de dulce de leche.

Procedimiento

  1. Calentar el horno a 180 grados.
  2. En un bol grande mezclar con la punta de los dedos la harina con las yemas, la sal y la manteca derretida. Trabajar la pasta por 10 minutos sobre un plato enharinado de manera de obtener una masa homogénea.
  3. Dejar reposar por 10 minutos y luego estirar con más o menos 2 mm de espesor. Cortar con un cortante de forma redonda de aproximadamente 5 cm de diámetro e ir poniendo en una placa de horno enmantecada con un espacio de 2 cm entre una y otra. Cocinar por 10 minutos y dejarlas enfriar.
  4. En un bol poner el azúcar impalpable y diluírlo con la crema mezclando muy bien.Está preparada para ser usada cuando recubre la parte de atrás de  la cuchara.
  5. Pasar cada tapa de alfajor y dejar unos 15 minutos para que se sequen.Luego rellenar con el dulce de leche y poner la otra tapa.
  6. Se sirven los alfajores santafesinos con el glaseado hacia arriba.

jueves, 30 de enero de 2020

Roscas de Alfajor

Ingredientes
Para la masa
  • 250 gr. de harina de trigo.
  • 125 gr. de aceite de oliva.
  • 70 gr. de agua.
  • 1/2 cucharadita de sal.
Para el alfajor
  • 250 gr. de miel.
  • 70 gr. de pan rallado de pan blando.
Preparación
  1. Comenzamos realizando la masa poniendo en un bol un poco de aceite, la harina, agua y la sal, removiendo todo hasta que la masa sea manejable.
  2. Para realizar la crema de Alfajor cogemos un plato hondo, añadimos la miel y el pan rallado mezclando bien hasta que formemos una pasta.
  3. Ahora llega el momento de darle la forma a las roscas y para ello cogemos una bolita de masa, la extendemos bien y la rellenamos con la crema de Alfajor y cerramos en forma de rosca. Finalmente, le realizamos tres cortes (ojos) a la rosca para que respire la miel.
  4. Las rocas de Alfajor originales se hornean a 220 grados durante diez minutos en un horno de leña, pero en nuestro caso nos valdrá nuestro horno eléctrico precalentado a 200 grados también durante diez minutos.

miércoles, 29 de enero de 2020

Alfajor "Marplatense"

Ingredientes

  • 200 g azúcar
  • 200 g manteca
  • Ralladura de 2 naranjas
  • 60 g miel
  • 30 g extracto de malta
  • 30 cc coñac
  • 2 huevos
  • 30 g cacao amargo
  • 5 g bicarbonato de sodio
  • 400 g harina 0000
  • 100 g almidón de maíz
  • Pizca de sal fina .
  • 500 g Dulce de leche

Procedimiento:

  1. Batir la manteca blanda con el azúcar y la ralladura de naranjas hasta blanquear.
  2. Agregar los huevos, miel, malta y cogñac, mezclar.
  3. Unir los secos, harina, almidón, cacao, bicarbonato y sal, tamizar y agregar a la base anterior uniendo sin amasar.
  4. Envolver la masa con papel film y llevar a heladera por 2 hs. -
  5. Estirar la masa a 4 mm de espesor y cortar con aro de 6 cm de diámetro.
  6. Estibar las tapitas en placa enmantecada o con papel vegetal o plancha de silicona. Hornear de 8 a 10 minutos en horno precalentado a 160 Grados. Que no doren sinó se resecan.

Glasé de secado rápido:

  • 1 clara
  • 200 g azúcar impalpable
  • gotas jugo de limón
  • 200 g azúcar común
  • 50 cc agua. 

El glase, yna vez listo hay que usarlo ya que seca rápido.Hacer un glasé común con la clara, gotas de limón y azucar impalpable, llevar a hervir los 200 de azúcar común con los 50 de agua, que hierva de 2 a 4 minutos. Volcar caliente sobre el glasé de clara y batir rápido, va a quedar fluído pero comenzará a secar rápido, bañar los alfajores, escurrir y listo.

Pablo Remaggi

Alfajores Santafesinos

Ingredientes:
Masa: 

  • 500 gramos harina 0000.
  • 5 yemas.
  • 5 gramos sal fina.
  • 50 cc licor de caña o coñac.
  • 100 gramos de manteca derretida.
  • 120 cc agua.

Glasé de secado rápido:

  • 1 clara.
  • 200 gramos de azúcar impalpable.
  • unas gotas de jugo de limón.
  • 200 gramos azúcar granulada + 50 cc agua.

Relleno:
500 gramos de dulce de leche repostero
40 cc coñac o algún licor de tu gusto.
Preparación:

  1. Para la masa vamos a hacer una corona con la harina y sal, en el centro colocar todos los demás ingredientes húmedos. 
  2. Amasar energicamente hasta lograr una masa lisa y homogénea que no se pegue. 
  3. Descansar 15 minutos, sobar y estirar con pastalinda hasta que quede bien fina, que quiera empezar a transparentar. 
  4. Cortar con cortante de 6 a 8 cm, pinchar bien y hornear a 180 grados hasta que apenas doren y hagan globitos.
  5. Rellenar con dulce de leche formando los típicos alfajores santafesinos triples. De tres capas de masa, dos de dulce de leche.
  6. El glase, una vez listo hay que usarlo ya que seca rápido. Hacer un glasé común con la clara, gotas de limón y azucar impalpable, llevar a hervir los 200 de azúcar común con los 50 de agua, que hierva de 2 a 4 minutos. Volcar caliente sobre el glasé de clara y batir rápido, va a quedar fluído pero comenzará a secar rápido, bañar los alfajores, escurrir y listo.
Pablo Remaggi

Alfajores de Mandioca

Ingredientes 
  • Azúcar 200 g 
  • Esencia de vainilla 1 cdita 
  • Ralladura de limón 2 cdas 
  • Manteca 200 g 
  • Yemas 4 
  • Harina 0000 200 g 
  • Fécula de mandioca 300 g 
  • Polvo para Hornear 1 cda 
  • Bicarbonato de sodio 1 cda 
Preparacion
  1. Colocar en un bol el azúcar, la esencia de vainilla, la ralladura de limón y la manteca a punto pomada. Batir por 3 minutos, agregando las yemas de a una. 
  2. Por otro lado mezclar y tamizar los secos: la harina, la fécula de mandioca, el polvo para hornear y el bicarbonato de sodio. Incorporar al batido anterior. Formar un bollo, cubrir con film y llevar a la heladera por 1 hora. 
  3. Estirar con un palo hasta que alcance un1 cmde espesor (espolvorear la mesada con más fécula de mandioca para que no se pegue a la mesada). 
  4. Cortar discos a la manera tradicional o podes sorprender a todos y cortarlo en cuadrados, como los de la foto. 
  5. Un secreto es meter nuevamente en la heladera las tapitas cortadas, preferentemente en el  freezer o en el congelador por 5 minutos, más o menos 
  6. Precalentar el horno moderado – fuerte (180º C) y cocinar durante 10 minutos (no deben dorarse en la superficie, porque cambia mucho su sabor). Dejar enfriar sobre la rejilla. 
  7. A la hora de los rellenos podes optar por el tradicional dulce de leche, o por algún sabor regional, guayaba, rosella, naranja apepú… si lo haces con dulce de leche, le podes poner coco rallado 

Alfajorcitos Cordobeces

Ingredientes:
  • 200 gr. de azúcar molido, 
  • 6 yemas, 
  • 150 gr. de manteca, 
  • ralladura de cáscara de un limón, 
  • 360 gr. de fécula de maíz, 
  • 150 gr. de harina, 
  • 1 cucharadita de polvo de hornear. 
Preparación:
  1. Hay que batir el azúcar con las yemas hasta que esté espumosa (entibiarla apenas al baño de María), agregarle la manteca derratida, la ralladadura de limón y, de a poco, la fécula, la harina y el polvo de hornear. 
  2. Mezclar todo formando una masa, estirarla, dejándola algo fina y cortar con ayuda de un cortapastas chico y redondo. 
  3. Colorclar los discos en una placa enmantecada y enharinada y cocinar en horno a temperatura regular. 
  4. Retirar y dejar enfriar. Una vez fríos, unir de a dos con abundante dulce de leche en el medio. 
  5. Cubrirlos con un baño hecho mezclando una clara con azúcar impalpable hasta que quede espeso. 
  6. Batir unos diez minutos. 
  7. Aparte en una cacerola, poner 100 gr. de azúcar, cubrir con agua y colocar a fuego fuerte. 
  8. Cuando esté a punto hilo flojo, se le agrega la preparación de la clara con el azúcar impalpable, se revuelve bien y se pintan los alfajorcitos. 
  9. Hay que dejarlos secar.

Alfajores caseros

Ingredientes:
(16 alfajores)
  • 260 g de manteca fría en cubitos
  • 20 g de aceite neutro
  • 2 huevos
  • 150 g de centeno fino
  • 50 g de sarraceno
  • 150 g de lino molido
  • 260 g de azúcar mascabo
  • Pizca de sal
  • 10 g de masa madre
  • Dulce de leche y mantequilla de maní para rellenar
  • Granola
  • Variante: se pueden hacer solo de harina de centeno. El lino molido hace que las tapas sean más blandas.
Preparación:
  1. Integrar bien el azúcar con la manteca y el aceite. 
  2. Agregar los huevos, sumar todas las harinas, el azúcar y la pizca de sal. 
  3. Agregar la masa madre para fermentar las harinas, dejar descansar 10 minutos. 
  4. Retirar del bol y aplastar en una placa sobre un papel manteca hasta 1 cm de alto. 
  5. Enfriar o congelar. Cortar y disponer las tapitas en una placa. 
  6. Hornearlas frías a 180° C por 15 minutos o hasta que la base apenas toma color. Retirar. Si se cocinan de más quedarán duras. 
  7. Dejar enfriar y rellenar. Pasar los bordes por granola casera.

Alfajor navideño al estilo Jaén

Ingredientes
  • 1 Kg. de almendra tostada y molida con amor
  • 850 gr. de conserva de cidra
  • 900 gr. de azúcar
  • 200 ml. de agua
  • 30 ml. de anís extra-seco
  • La cáscara de un limón
  • 2 ramas de canela
  • Pan rallado
  • Obleas
Preparación
  1. En primer lugar, si compráis las almendras crudas y decís de tostarlas en el horno de casa y molerlas después, tened en cuenta que muchos disfrutan encontrándose trocitos de almendra en el alfajor. Pensad en dejar un par de buenos puñados para picarlos en trocitos más grandes para alegrar un poco el postre. Sólo tenéis que extenderlas en la bandeja del horno y hornearlas hasta que estén ligeramente doradas y luego destruirlas vilmente con una picadora hasta conseguir un polvo grueso y súper vitaminado.
  2. Así que una vez tenemos la materia prima lista, empezamos cociendo la cáscara de limón con el azúcar, la canela, el anís y el agua, dejando que el mejunje reduzca y se convierta en un almíbar espeso, ardiente y con un ligero tono dorado. Un tiempo de cocción más largo permite extraer los aromas y sabores del limón y la canela, haciéndolo mucho más sabroso, intenso y rico.
  3. Quizás el paso que puede entrañar más dificultad es el del punto del almíbar. Resulta que este puede adquirir la consistencia de punto de hebra si al levantarlo con la cuchara éste cae en forma del hilillo espeso y goteante. Un tiempo más elevado de cocción y entonces adquirirá la consistencia de punto de bola, mucho más compacta, densa y la que necesitaremos para nuestro alfajor. Si dejáis caer una gotita sobre un plato, os humedecéis un dedo en agua para no acudir a la unidad de quemados, y lo frotáis suavemente, veréis como adquiere una forma esférica. Ese es el punto.
    Nuestro alfajor lleva cidra, lo que aportará un grado de humedad extra a la receta, de forma que cuanto más espeso el almíbar más consistencia tendrá para compensar el agua de la fruta. La receta clásica excluye la cidra e incorpora toneladas de almendras además del almíbar al punto de hebra, más fluido para aportar precisamente esa carencia de humedad. No obstante en cualquiera de los casos podremos regular la consistencia con posterioridad añadiendo pan rallado muy fino a la masa, pero eso lo veremos después.
  4. Apartamos nuestro almíbar bolero, pescamos la corteza de limón y las ramas de canela para eliminarlas, y añadimos la cidra en conserva, removiendo hasta homogeneizar un poco la mezcla antes de añadir la lluvia de almendras.
  5. Conseguiremos un engrudo espectacular, propio del contenido del estómago de nuestra mascota. El intenso olor a anís, canela y almendra, nos hará superar la arcada de la guarrada anterior. Debe quedar una masa consistente, que mantenga la forma y no se desparrame por la mesa. Si no es así, añadiremos un poco de pan rallado hasta corregir el espesor.
  6. Nos humedecemos las manos en anís y extendemos la mezcla sobre las obleas, masajeando.
  7. Tapamos con otra oblea y pasamos un rodillo suavemente para distribuir y compactar el contenido, que debería tener un centímetro de espesor aproximadamente. Si desborda, se elimina el sobrante pasando un dedo y listo. 
  8. Ahora a esperar un poco a que se enfríe del todo, se endurezca un poco y adquiera algo más cuerpo.

Milhojas

Ingredientes

La masa
  • 200 gramos de manteca blanda
  • 200 gramos de crema de leche
  • 2 tazas de harina
Glasé
  • 1 clara
  • 125 a 150 gramos de azúcar impalpable (o cantidad necesaria)
  • Jugo de limón
  • 2 cucharadas de agua
  • 1 cucharada de azúcar
Varios
  • 60 gramos de chocolate
  • 500 gramos de dulce de leche (yo puse capas super finas y use en total, con el borde de la torta y todo 800 gramos)
  • 100 gramos de nueces molidas (acá me paso al revés, me sobraron un montón de nueces molidas, con lo que cuestan! por suerte las voy a aprovechar seguramente para alguna galletita navideña)
  • Nueces mariposa para decorar
Preparacion

Masa
  1. Bata con una cuchara la manteca hasta convertirla en pomada. Agréguele gradualmente la crema, hasta incorporarla en su totalidad.
  2. Únale de golpe la harina y mezcla rápidamente. Vuelque la preparación sobre la mesa y amase lo más velozmente que pueda, hasta formar un bollo bien consistente.
  3. Dele al bollo forma de cilindro gordo (8 a 10 centímetros de diámetro). Córtelo en rodajas de alrededor de 1 centímetro y medio de espesor (no se olvide de enharinar muy bien el cuchillo cada vez). (Yo corte 9 rodajas, y con los recortes me salieron 2 discos más)
  4. Enharine casa rodaja de masa y colóquelas, sin encimar, en una fuente. Estaciónelas en la heladera hasta que tengan consistencia suficiente para ser estiradas.
  5. Corte cuadrados de papel manteca. Coloque sobre la mesa un cuadrado de papel y luego enharínelo bien.
  6. Retire una porción de masa de la heladera, apóyela en el centro del papel y, con el palote igualmente enharinado, estire cada rodaja dándole forma circular y dejándola finita como papel (tenga en cuenta que de esto depende el éxito del milhojas).
  7. Apoye sobre la masa un plato playo invertido y, con un cuchillito que no sea dentado, siga el contorno y corte la masa a su medida. Encime los recortes, sin amasarlos, y guárdelos en la heladera para hacer otros discos más adelante.
  8. Levante el papel que contiene el disco de masa y apóyelo dentro de una pizzera. Después pinche la masa enteramente con un tenedor.
  9. Cocínelo en horno caliente, hasta que se ampolle y tome un aspecto dorado y crujiente (¡que no se queme...!). Estire y cocine del mismo modo el resto de los discos de masa.
  10. Ponga un poquito de dulce de leche en el centro de la fuente donde va a armar el milhojas y deslice un disco de masa cocido. Así el alfajor quedará fijo y no se moverá durante el armado.
  11. Les recomiendo buscar una fuente plana que sea del mismo tamaño del plato que van a usar antes de empezar: las fuentes comunes, que tienen una imperceptible hendidura en el centro van a hacer que la primer capa del milhojas se rompa en mil pedazos y dificulte el armado subsiguiente de las capas.
  12. 1Unte la superficie del disco con una capa fina de dulce de leche.
  13. 1Tape con otro disco, deslizando cuidadosamente desde su papel.
  14. 1Con la misma técnica, vaya untando y deslizando todos los discos, con mucha delicadeza porque son muy frágiles. Aunque si alguno se le rompe... ¿quién se dará cuenta?
  15. 1Coloque el último disco del milhojas, pero no lo unte con dulce de leche.
Terminación
  1. Tome un cuchillito con borde dentado y serruche los costados del alfajor para emparejarlos.
  2. Unte los costados del alfajor con dulce de leche y adhiérale las nueces molidas, presionando bien con una espátula. (Limpie con papel de coicna los bordes de la fuente...)
Decoración
  1. Bata la clara hasta que esté espumosa y divídala en dos. Coloque una mitad en un bol y deseche la otra (batida, es la forma más práctica de dividir una clara en mitades).
  2. Mézclele a la clara el azúcar impalpable y el jugo de limón. Ahora bátalo con batidora hasta que se ponga bien esponjoso y... ¡habrá aprendido a hacer glasé real!
  3. Disuelva el azúcar con las dos cucharadas de agua y haga hervir. Agréguelo de a poquito al glasé real, revolviendo, hasta obtener un baño liso y suave que corra por sí solo y cubra perfectamente la superficie que se desea revestir. Pruébelo bañando primero un trocito de pan...
  4. Una vez obtenido el "punto", vierta este baño de glasé en el centro del milhojas y, sosteniendo firmemente la fuente, hágala girar para que se extienda bien (o distribuya el baño con una espátula...).
  5. Ahora ralle el chocolate y disuélvalo al calor de un bañomaría suave. Retírelo, deje espesar un poquito (al enfriarse se espesa), póngalo en un cartuchito de papel manteca y, sobre el baño de glasé aún húmedo, trace círculos concénticos (no importa que alguno le salga un poco chueco...).
  6. Tome ahora un escarbadientes o un palito de brochette y arrastre los círculos de chocolate marcándole radios desde el centro hacia el borde, y desde el borde hacia el centro, en forma alternada. El efecto parecerá mágico... ¡y no se notarán las imperfecciones! Termine la decoración del milhojas con nueces mariposas y/o mitades de cerezas glasé. Si no se anime a trabajar así el chocolate... ¡invente la decoración que a usted más le guste!
  7. Yo no hice la decoración sugerida, ya que necesitaba algo que a la hora de soplar la velita (y sí, una sola, 97 no entraban en la torta!), no se notara que la tarde anterior había cortado una porción para la foto! me inspiré en lo sugerido, pero hacerle los aros de chocolate y luego los rayos de bicicleta, me camuflaban perfectamente el corte ;)

Alfajores de chocolate

Ingredientes
Aproximadamente 24 Alfajores
  • Manteca (pomada)175 gramos
  • Azúcar 175 gramos
  • Harina 0000 350 gramos
  • Maicena 150 gramos
  • Polvo de hornear 15 gramos
  • Esencia de vainilla 1 cucharadita
  • Dulce de leche 1 cucharada
  • Ralladura de 1 naranja
  • Agua 60 cc
  • Huevos 1
Relleno
  • Dulce de leche repostero cantidad necesaria.
Cobertura
  • 300 gramos de chocolate para cobertura
  • 300 gramos de Manteca
Preparación
  1. Batir la manteca pomada (manteca a temperatura ambiente) junto con el azúcar,hasta obtener una crema y que el azúcar no se perciba.
  2. Incorporar la de esencia de vainilla, el dulce de leche, el huevo, la ralladura de naranja y el agua, batir todo hasta que se integren todos los ingredientes
  3. En otro recipiente tamizar la maicena junto con la harina y el polvo para hornear.
  4. Unir los ingredientes, sin llegar a amasar. Envolver la masa con film y dejar descansar unos 20 minutos en la heladera.
  5. Para estirarlos te cuento un Tip que no falla: colocar un papel manteca sobre la superficie de trabajo, encima disponemos la masa y colocamos otro papel manteca por encima de ésta masa, y ahora con ayuda del palo de amasar podemos estirar la masa sin que se nos pegue a la mesada. La estiraremos de 4 milímetros de espesor y cortaremos los discos con un cortante para masa,  ( yo los hice con un cortante circular de 5 centímetros diámetro.)
  6. Disponer los discos de masa en una fuente para horno con papel de horno en la base, y  llevar a la heladera unos  30  minutos para que estén bien frías, hasta el momento de la cocción. Cuanto más frías mejor.
  7. Precalentar el horno a 180 grados.
  8. Hornear las tapas por unos 5 minutos aproximadamente.Es importante no pasar el tiempo de cocción ya que la masa deberá quedar blanda para lograr el efecto deseado.
  9. Derretir el chocolate junto a la manteca a baño María para la cobertura.
  10. Armado de los alfajores: Una vez frías las tapas , rellenar con dulce de leche y bañarlos en chocolate, sobre una rejilla metálica. Para el baño de chocolate pueden también pincelarse de ambas caras y de los laterales.

Alfajores Negro y Blanco

Alfajor Negro


Ingredientes
Liquidos
  • 200 grs de Manteca
  • 200 grs de Azucar
Mezclamos con batidora para cremar, una pomada y agregamos
  • Ralladura de naranja
  • 50 grs de Miel
  • 40 grs de Extracto de malta (si no usamos duplicamos la miel)
  • 2 Huevos que incorporamos de a uno mientras batimos
Secos
  • 400 grs Harina 0000
  • 5 grs de Bicarbonato de Sodio
  • 5 grs de Bicarbonato de Amonio
  • 1 o 2 piscas de Sal
  • 20 grs de Cacao Amargo
  • 100 grs de Almidon de Maiz
Preparación
  1. Se prepara la pomada como se explica mas arriba, mezclando la manteca con el azucar y revolviendo, luego se le agregan lso otros ingredientes liquidos y la ralladura.
  2. Se tamizan los secos, es importante.
  3. Se incorporan los secos tamizados ala crema pero no se amasa, no hay que amasar. Se incorpora con una paleta y se mezcla sin amasar.
    La masa no debe quedar elástica, debe romperse y no desarrollar gluten.
    Con la espátula mezclamos y la vamos cortando en ese proceso.
  4. La aplastamos y envolvemos en film, la levamos ala heladera. Asi la masa sera mas trabajable.
    Si al usarla sentimos que esta demasiado fria, lo que hacemos es romperla con las manos, apilarlas y golpearlas con el palo para amasar. La masa fria se rompe al intentar estirarla y eso no nos sirve.
    Al apilar los trozos y golpearlos la temperatura comienza a ajustarse y nivelarse.
  5. Se precalienta el horno a 180ºC; la masa para se horneada debe llegar a horno caliente, no frio
  6. Lo proximo es estirar la masa, asi que para esto espolvoreamos algo de harina por debajo dela masa para que no se pegue, hacemos lo mismo por encima para que el palote no quede pegado en la masa.
  7. Estiramos la masa, podemos usar palitos de aproximadamente un centimetro colocado por los lados a fin de que sirvan de borde, el palote se desliara por encima y la masa se estirara de manera uniforme y pareja.
  8. Cortamos las galletas, debemos tener en cuenta que el cortante, su tamaño no es el tamaño final de la galleta cocida puesto que al hornearse crecera.
  9. Al colocar las masa para las tapas en la lata de hornear debemos separarlas por lo menos un centimetro entre cada masa. Horneamos alrededor de 10 a 15 minutos
  10. Al armar el alfajor, tomamos las galletas horneadas y dejamos la parte lisa hacia fuera del alfajor y la parte mas curva sera la que reciba el dulce del relleno.
  11. El dulce de leche debe ser repostero dado que es mas firme que el clásico y no se derramara.
  12. El dulce de leche puede aromatizarse con ralladura de naranja, si se desea.
  13. El chocolate para el baño debe ser chocolate de tipo cobertura que fundimos a baño maria evitando que hierva. Cundo el chocolate este listo, tomamos un alfajor y con cuidado sumergimos una de sus caras hasta la mitad del alfajor en el chocolate, levantamos y dejamos que escurra ayudando este proceso golpeandonos levemente el brazo que sostiene el alfajor con la otra mano, asi el excedente de chocolate caera hacia el recipiente de la cobertura.
  14. Posterior a esto depositamos el alfajor sobre papel manteca que evitara que el chocolate se pegue y se dañe esa cobertura. La cara del alfajor que hemos cubierto con chocolate es la que se depositara sobre el papel manteca.
  15. Hacemos esto con todos los alfajores y luego, cuando la tapa cubierta este seca, colocamos los alfajores sobre una rejilla metalica con un recipiente debajo y bañamos los alfajores valiendonos e una cuchara con la que recogeremos el chocolate fundido y lo volcaremos sobre los alfajores. Debemos cuidar de que el chocolate cubra todo el alfajor. Dejamos que el chocolate seque.
Notas
  • El bicarbonato de sodio, actúa como un Agente leudante cuando entra en contacto con un medio ácido, como la manteca y el de amonio expande la galleta y además absorve la humedad y la transforma en crocante.
  • Los alfajores sin el bicarbonato de amonio quedan bien, solo hay que vigilar bien las tapitas porque levan rapidisimo y pierden la forma.
  • Esta masa, en el freezer dura 6 meses.



Alfajor Blanco


Ingredientes
~Masa:
•Liquidos:
  • Manteca 300 GRS
  • Azucar impalpable 100 GRS
  • Miel 100 GRS
  • Huevos 2
  • Pizca de sal
  • Esencia de vainilla
  • Ralladura de limón y naranja
•Secos:
  • Harina 0000 500 GRS
  • Almidon de maiz 100 GRS
  • Cacao 40 GRS
  • Polvo para hornear 10 GRS
  • Bicarbonato de sodio 5 GRS
Hacer Masa pero no amasar y dejar descansar en heladera. Estirar y cortar tapitas. Horno 180°c 12-15 mins.

~Cubierta de merengue:
  • Claras 4
  • Azucar 240 GRS
  • Agua 60 GRS
Hacer merengue Italiano, cubrir alfajores y dejar secar minimo 24hs.

~Relleno:
  • Dulce de leche 1 kg.
La receta rinde unos 16-18 alfajores grandes.